La atención es un «poder de detención».

La atención consiste en detener el flujo constante de sensaciones, percepciones, ideas y sentimientos, considerando sólo uno de esos y excluyendo los demás.

La atención es una cualidad extraordinaria, una de las condiciones esenciales para tener éxito en el ámbito académico.

El desarrollo de la inteligencia es proporcional al de la atención.

Tipos de atención

Existen dos tipos de atención:

Calidad de atención (atención focalizada).

Supone la capacidad para filtrar la información que nos llega. Quedarnos con lo verdaderamente importante y descartar lo que nos distrae. De todo el flujo de estímulos que nos llegan (incluidos los propios pensamientos) centrarnos sólo en uno o en los necesarios.

Tener buena calidad de atención es saber captar todos los detalles necesarios para entender lo que estamos estudiando. Supone hacer una buena relación entre los datos que nos dan y no «perder» nada.

Atención sostenida.

Supone la concentración, el tiempo que somos capaces de aguantar estudiando. Cuanto somos capaces de esforzarme continuadamente. Puede ser entrenado y mejorado aumentando progresivamente los tiempos de trabajo.

En función de la capacidad que tenga la persona en estos dos tipos de atención, variará la forma de actuar:

Buena calidad de atención y buena atención sostenida:

La capacidad atencional de los niños muy buena y puede afrontar sus estudios sin dificultad en cuanto a atención se refiere.

No debe realizar un esfuerzo específico para mejorar su atención, pero debe seguir así.

Si sus resultados no son adecuados, hay otra dificultad que está interfiriendo en su rendimiento: hábitos de estudio, factores emocionales o cognitivos…

Buena calidad de atención y atención sostenida deficitaria:

El niño generalmente comete un bajo número de errores, se le quedan los detalles fácilmente. Le resulta fácil centrarse en un solo estímulo y pasar de las distracciones, pero le dura poco tiempo. Por ello:

  • Debe aumentar su esfuerzo, aumentar su tiempo de concentración poco a poco.
  • Marcarse pequeñas metas que regulen y favorezcan que sea capaz de mantenerse cada vez más tiempo centrado.
    • No levantar la vista del libro hasta no haber terminado una página, luego página y media…
    • Puede estudiar con un reloj, controlando el tiempo que dura hasta distraerse. La próxima vez, intentará aguantar más.
  • Descansar entre tiempos de estudio 10 minutos.
  • Le vendrá bien hacer crucigramas, encontrar diferencias, sudokus… en definitiva, realizar ejercicios que requieran concentración.

Calidad de atención deficitaria y buena atención sostenida:

Es el alumno que comete un gran número de errores a pesar de que puede estar mucho tiempo estudiando. Pierde detalles importantes lo que disminuye su rendimiento.

Por esto, debe realizar un plan de estudios en base a sus posibilidades:

  • Hacer tiempos de estudio de máximo media hora, descansando 5 o 10 minutos.
  • En ese tiempo de estudio debe ser firme. Debe comprobar continuamente que nada se le escape. Por la naturaleza de su atención se le escapan muchas cosas.
  • Repetir las cosas aunque crea que ya se las sabe. COMPROBAR, COMPROBAR, COMPROBAR.
  • Ante un examen no empezar a escribir inmediatamente. Debe pensar por dónde empezar, qué debe poner y en qué orden. Empezar a escribir una vez que lo tenga claro.
  • Después del examen: COMPROBAR, COMPROBAR, COMPROBAR.

Calidad de atención deficitaria y atención sostenida deficitaria:

El niño presenta un déficit evidente en la atención. Tiene dificultades para concentrarse, para saber quedarse con un solo estímulo de todos los que recibe (incluidos sus pensamientos) y por ello, pierde detalles importantes. Y además, no aguanta mucho tiempo estudiando o concentrado. ¿Qué puede hacer?

  • Debe empeñarse a fondo en trabajar su atención para que pueda mejorar su rendimiento.
  • De cara a mejorar el tiempo que es capaz de estar centrado, el alumno puede marcarse metas, que le vayan guiando y haciendo que se esfuerce cada vez un poquito más.
    • No levantar la vista del libro hasta no haber terminado una página, luego página y media…
    • Puede estudiar con un reloj, controlando el tiempo que dura hasta distraerse. La próxima vez, intentará aguantar más.
  • Ejercicios como crucigramas, encontrar diferencias, sudokus… le ayudarán a fijarse más en los detalles, en focalizar su atención. Será más útil, si realiza autoverbalizaciones que guíen su tarea:
    • Primero entiendo qué tengo que hacer.
    • Tengo que saber cómo lo voy a hacer: los pasos que voy a seguir.
    • Voy repasando para ver que no me olvido nada.
  • Realizar pequeños cambios atencionales y volverse a centrar en la tarea, le permitirán estar más tiempo concentrado. Por ejemplo, para poder estar 20 minutos centrado, a los 10 minutos mira un poco por la ventana, respira 3 veces y continúa con la tarea.

Si aún así sigue habiendo dificultades…. Contactad con expertos seguro que os pueden echar una mano.